Mis primeras semanas en la Facultad de Enfermería en la UNAV
Llegué a Pamplona prácticamente con un mes de retraso y realmente me angustiaba haber perdido tantas clases. El lunes 29 de setiembre me presenté a primera hora para conocer parte del campus y después del almuerzo, cuando me dirigía a la biblioteca para intentar ponerme al corriente con todo, conocí a Lisseth, ella hacía el doctorado en la UNAV y también era peruana. Fue tan amable en acompañarme hasta la biblioteca y me presento a Maite, quien estudiaba el mismo máster que yo.
Maite fue una luz en medio de la oscuridad, porque sin conocerme y sin hacer demasiadas preguntas, me prestó todos sus apuntes y no dudó en compartir todo lo que tenía. Ese día me sentí tan afortunada de conocerla y fui más afortunada aún, porque tuve la oportunidad de disfrutar de su amistad, también compartimos la mayoría de los grupos en el máster y comprobé que el trabajo en equipo sí existe.
En los siguientes días no asistí a una reunión de bienvenida porque no aún no terminaba el trabajo de la siguiente clase, sin duda no fue una decisión fácil, me hubiera encantado asistir y tomar algunas fotos para el recuerdo. Pero el esfuerzo valió la pena, tengo gratos recuerdos de ese curso.
Así como esas, tomé muchas decisiones difíciles durante el máster, por ejemplo, estudiar dos itinerarios y no continuar el doctorado.
La decisión de estudiar dos itinerarios
Al iniciar el Máster tenía que elegir si estudiaba el itinerario de Práctica Avanzada o el de Gestión en Enfermería y después de analizarlo, solicité estudiar ambos itinerarios, no quería desaprovechar el gran nivel académico de mis maestras. No fue una decisión fácil, primero porque la beca incluía solo uno de los itinerarios y segundo porque tenía que estudiar 10 créditos adicionales en el mismo periodo.
Felizmente la Directora del Máster aceptó mi solicitud y me permitió, de manera excepcional, estudiar ambos itinerarios. Tuve que invertir mis ahorros personales y me dediqué a estudiar al 100%, fue una experiencia maravillosa, realmente vivía para estudiar y la biblioteca se convirtió en mi segundo hogar.
Además de las interminables horas de estudio, tengo algunos recuerdos que me llenan de nostalgia. Por ejemplo, antes de ingresar a clases o a la biblioteca pasaba por el oratorio de la facultad y leía un par de páginas de un libro que extraño mucho y de regreso a casa entraba al oratorio de la Clínica Universidad de Navarra porque sentía tanta paz.
Fin de Máster y retorno a Perú
Navarra marcó un hito en mi vida, no solo me ayudó a ser mejor en mi profesión, sino también me ayudó a ser una mejor persona, me reencontré conmigo misma y con mi fe. Establecí los límites de mi nueva vida y estoy muy agradecida con Dios por la maravillosa oportunidad que me dio.
Finalmente, después de casi un año, tuve que presentar mi Trabajo de Fin de Máster (TFM), fueron muchas horas de trabajo y mi asesora me guió de una manera espectacular. Sin duda, la parte que más disfruté de todo el trabajo, fue la búsqueda bibliográfica, de hecho también fue destacado por mis jurados. Después de aprobar y de asistir a la ceremonia de graduación tuve que organizar el retorno.
No quise regresar sin antes hacer el intento de postular para el doctorado, al cual fui admitida pero por razones personales decidí no continuar y regresar a Perú. ¿Si fue una buena decisión? Solo Dios sabe.
Algunos tips para que te vaya mejor que a mi:
- Respecto al TFM, planifica todas las actividades y distribuye tu tiempo de acuerdo a la prioridad de cada capítulo. Yo destiné muchísimo tiempo a la búsqueda bibliográfica y siento que me faltó un poco de tiempo para la parte de la propuesta.